lunes, 13 de febrero de 2012

Yañez de la Almedina

He encontrado este artículo del blog Collige Rosas, el que invito a leer por lo interesante de su contenido


Y es que yo la lo dije.
Con la Gran Novedad del redescubrimiento del cuadro de la Mona Lisa del Museo del Padro, Leonardo ha vuelto a la actualidad. Hasta nuestro amigo Thiago ya vaticinó hace años que este cuadro era realmente importante. Yo mismo recuerdo pasar por el Prado y mirar atentamente aquella Mona Lisa secundaria que estaba medio olvidada en uno de sus muros como una copia de la afrancesada.
Pero he aquí que resulta que ahora ese olvidado cuadro ha pasado del anonimado a plena actualidad porque resulta que las investigaciones y restauraciones a las que ha sido sometido han dado lugar al planteamiento de una teoría bastante verosímil y que viene a decir que la Mona o Madonna del Prado se pintó paralelamente en la escuela de Leonardo al tiempo que el maestro pintaba la afrancesada que ha pasado por la Primera y Original.
Pues bien. Toda aquella criatura que un día tenga la dicha de pasar por la Ciudad de Cuenca -Patrimonio de la Humanidad- no ha de dejar de visitar estos dos (entre otros del mismo autor) cuadros que ahora siguen:

¿No notan nada?
Pues fíjense bien. Fíjense bien si son amantes del arte.
Y es que estas pinturas manifiestan una evidente influencia del Gran Leonardo da Vinci (miren las caras y comprueban los parecidos con la cara de la Mona Lisa del Prado y la Mona Lisa afrancesada)
Y es que, uno no puede pasar por Cuenca sin visitar estas pinturas. Sería un crimen manifiesto. Un pecado imperdonable que a uno le pongan mirando para Cuenca y no vea estas bellas tablas que junto con otras del mismo autor se esconden (digo se esconden porque hasta hace cuatro días estaban sin iluminar siquiera junto con otros retablos del mismo autor) en la Santa Iglesia Catedral Basílica de Cuenca, una de las Catedrales más intrigantes y desconocidas de España.
Pues bien... el autor de esas tablas y de las que aquí voy colocando no es otro que el Gran y Magnífico YAÑEZ DE LA ALMEDINA. Uno de los pintores olvidados de nuestro Renacimiento Español.Y es que Yañez no era cualquier cosa. Una vez tuve unas piezas de Yáñez en mis manos y tengo que deciros que mientras las limpiaba, casi me corro del gusto, porque tener esas maravillas entre las manos y poder quitarles parte del polvorio acumulado que tienen encima, no es moco de pavo... ¡qué maravilla!.

Hernando o Fernando Yáñez de la Almedina (Almedina, Ciudad Real, h. 1489 - Valencia, 1536), nació en Almedina, provincia de Ciudad Real; es, pues, un pintor manchego, como su amigo y habitual colaborador el pintor Hernando de los Llanos; Algunos le dan origen morisco , claro que ésto puede ser una divagación derivada de las tonalidades y diseños moriscos que da a las vestiduras de los personajes en sus cuadros (Yo tiendo a pensar que Yáñez no era morisco sino que más bien, trajo el Renacimiento que había aprendido en Italia junto con Leonardo a España, dándo a su pintura matices localistas-moriscos propios de la España del momento).-

Joven aún debió marchar a Italia, como indica el indudable italianismo de su estilo, que denota una marcada influencia del sfumato de Leonardo da Vinci y otras influencias florentinas, así como de los círculos venecianos de Giorgione de Castelfranco; en dos documentos de 1505 sobre la pintura de La batalla de Anghiari de da Vinci y sus discípulos en el palacio Vecchio de Florencia se cita a un Ferrando Spagnolo, pittore, lo que acaso corresponde a Yáñez.
Las malas lenguas aseguran que la estancia de Yáñez de la Almedina con Leonardo fue un infierno para el Genio del Renacimiento pues, como buen discípulo no sólo aprendió del maestro las técnicas artísticas (técnicas y similitudes que todos podemos ver en los cuadros que os pongo) sino que también aprendió las técnicas amatorias. (ni me imagino, visto lo visto, las técnicas amatorias homosexuales de Leonardo , con todo el ingenio que llevaba dentro... ¡dioooossss!)
Y es que, al parecer Yánez de la Almedina trajo un infierno a la Escuela de Leonardo y que el pobre maestro sufrió de lo suyo, pues el español se cepillaba literalmente al novio de Leonardo, con lo cual aquello además de un círculo artístico, debió de ser un círculo de discordias amorosas que terminaría a palos... pienso yo!... claro que, lo mismo hacían tríos y vete tú a saber... que al parecer y según dice Andrés el Homógrafo, los tríos siempre han estado muy de moda... no sé!... El caso, es que si no quieres perder la Paz, no metas a un español en tu escuela... jajaja!

A su vuelta a España se estableció en Valencia, donde aparece documentado por vez primera en 1506, fecha en la que pintó el retablo de San Cosme y San Damián para la catedral de Valencia, quemado casi enteramente en 1936 (¡vaya fatalidad para los que adoramos a este autor); allí encontró un mercado para su pintura y trabajó ininterrumpidamente hasta 1526 colaborando con el citado Hernando de los Llanos; ambos firmaban Hernando o Fernando, hecho que generó la confusión de creer que eran un mismo pintor; trabajaron en las puertas del Altar Mayor de la Catedral en 1507 y en las doce tablas de una vida de la Virgen para el retablo mayor de la catedral, conjunto importante porque representa el establecimiento del modelo leonardesco en tierras levantinas; si bien estos dos pintores son acusadamente leonardescos y renacentistas, la imitación de Leonardo por Llanos es más literal y Yáñez posee un estilo con más recursos; Yáñez hizo algún trabajo en Barcelona en 1515, pero casi toda su obra conservada corresponde al periodo de Valencia, donde pintó piezas como El abrazo ante la Puerta Dorada, La Adoración de los pastores y La Dormición de la Virgen, todas en las puertas del retablo mayor de la catedral. Llanos y Yáñez abandonaron Valencia antes de 1520, dirigiendose uno a Murcia y el otro a Cuenca.

En 1531 se sabe estaba en Cuenca pintando varios retablos, noticia que es la última conservada sobre este pintor. Así pues, pueden establecerse tres periodos o fases en Yáñez: una italiana, a la que se le atribuye Los Santos Ermitaños del Museo Brera de Milán, una valenciana, la más importante, y una conquense, final.


Pues... vistos los rostros de los personajes de Yañez y visto el cuadro del Prado, y toda vez que en estos días la televisión aseguraba que la Mona Lisa del Prado era obra de escuela de Leonardo, yo me atrevo a decir que La Mona Lisa del Prado es obra de mi amigo YAÑEZ DE LA ALMEDINA... Y si hay alguien que pueda contradecirme, que vea todos esos cuadros y compare.

1 comentario:

  1. Jejeje! Ha sido una sorpresa encontrar mi panel sobre Yañez en tu blog! Te agradezco que hayas considerado interesante su contenido, aunque cuando lo escribí intenté hacerlo de una forma lúdica y divertida... jajajaj!
    Una maravilla tu blog... para los que adoramos a Yañez de Almedina, es una sorpresa encontrar paneles tan buenos como los que tienes expuestos y que ayudan a divulgar al Padre del Renacimiento en España.
    Un saludo desde Cuenca.
    Angel

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